Intentando usar la Biblia para justificar el comportamiento homosexual
- Gary DeMar
- 20 jun
- 5 Min. de lectura
En la edición del 10 de marzo de 2007 del Marietta (Georgia) Daily Journal apareció un artículo titulado "Los homosexuales intentan encontrar su lugar en el cristianismo". Sustituya las palabras "ladrones", "adúlteros", "mentirosos", "borrachos", "asesinos" y cualquier otro grupo de pecadores y tendrá una buena descripción de quiénes componen la Iglesia de Jesucristo. Si usted no es pecador, entonces usted no es cristiano. El cristianismo no es para gente perfecta. La pregunta es: ¿Puede una persona rodar su pecado a su nueva vida en Cristo? ¿Puede un asesino, por ejemplo, seguir asesinando y seguir diciendo que es cristiano? La Biblia dice que no: "¿Qué diremos, pues? ¿Continuaremos en el pecado para que aumente la gracia? ¡Que nunca sea así! ¿Cómo, habiendo muerto al pecado, vamos a seguir viviendo en él?". (Ro 6:1-2).
Por supuesto, ser cristiano no significa que nos volvamos impecables y que nunca tengamos que luchar contra viejos y nuevos pecados, más bien significa que reconocemos nuestras fallas pecaminosas y nos esforzamos por superarlas mediante el arrepentimiento y la invocación a Dios en busca de la ayuda espiritual necesaria. Este fue el mensaje de Jesús para la mujer sorprendida en adulterio: "Desde ahora no peques más" (Jn 8:11). Lo que implica la amonestación de Jesús es que la mujer establezca nuevas relaciones basadas en preceptos bíblicos, los mismos preceptos que estaba violando. Lo mismo ocurre con la mujer samaritana (Jn 4:39). No basta con decir no a la mala conducta, la cual debe ser sustituida por una buena. Pablo le dice al ladrón que "no robe más" (la exclusión negativa), "sino que trabaje, haciendo con sus propias manos lo que es bueno" (la posición positiva) (Ef 4:28).
He conocido a ladrones muy buenos, quienes si hubieran puesto la misma cantidad de energía en una empresa real en vez de buscar cómo estafar a la gente, hoy serían millonarios. Sin embargo, pasaban las 24 horas del día evitando que la policía los pillara por sus nefastos actos. Si los homosexuales pasaran tanto tiempo tratando de establecer relaciones bíblicas como lo hacen tratando de justificar su estilo de vida homosexual, podrían superar el control que los deseos homosexuales tienen sobre ellos.
Lo que informa el artículo del Marietta Daily Journal es que un grupo de homosexuales está intentando encontrar una manera de "encontrar un equilibrio entre ser gay y cristiano" preguntándose si "estas dos cosas podrían coexistir". Su primer paso fue consultar la Biblia sobre el tema, la reverenda Kimberleigh Buchanan, pastora de Pilgrimage United Church of Christ, hace la siguiente afirmación: "La Biblia dice muy poco sobre la homosexualidad y Jesús no dice nada sobre la homosexualidad". Su primera afirmación es falsa, la Biblia dice bastante sobre la homosexualidad. Pero supongamos que en la Biblia no se mencionara la prohibición de la homosexualidad. ¿Significa esto que la homosexualidad es un comportamiento sexual aprobado y que los matrimonios homosexuales deben ser sancionados?
La Biblia no tiene por qué decir nada sobre la homosexualidad y el matrimonio homosexual, ya que la norma establecida es una relación sexual y matrimonial entre hombre y mujer. Si les digo a mis hijos: "quédense en la casa mientras su padre arregla el techo", no tengo que agregar "no salgan". La norma positiva implica la prohibición negativa. La señal del límite de velocidad que dice "55" incluye cualquier velocidad por encima de "55" sin decir nunca, no vaya más rápido de "55 millas por hora". Basándonos únicamente en el relato del Génesis, no hay necesidad de ni un solo versículo que condene la homosexualidad. Afirmar la relación heterosexual -un hombre con una mujer- condena la relación homosexual por definición. Con la norma establecida, cualquier desviación es, por definición, anormal.
Veamos la segunda afirmación de Buchanan de que "la Biblia dice muy poco sobre la homosexualidad". Hay referencias explícitas a las prácticas homosexuales en los siguientes textos (Gn 19; 18:22; 20:13; Dt 23:17-18; Jg 19:16-30; Ro 1:26-27; 1 Co 6:9; 1 Tm 1:9; Ju 7). Su afirmación es falsa.
¿Qué decir de su afirmación de que "Jesús no dice nada sobre la homosexualidad"? Jesús no dice nada acerca de la violación, el incesto, la bestialidad, la pedofilia o hacer tropezar a los ciegos y; sin embargo, estas prácticas son condenadas hoy día. La Palabra de Dios es más que las palabras de Jesús en rojo.
Para desacreditar la validez y aplicabilidad de la ética veterotestamentaria, Buchanan nos lleva a Levítico 20:9. Basándose en este versículo, ella nos dice: "Se supone que usted deba apedrear a sus hijos si se burlan de usted". Hay dos problemas con esta línea de razonamiento. Primero, asumamos que la sanción de la pena de muerte ya no es aplicable bajo el Nuevo Pacto. ¿Significa esto que insultar a los padres se convierte en una virtud en el Nuevo Testamento?. Entonces, aunque la sanción ya no esté en vigor, el mandamiento de no maldecir a los padres sigue estándolo, ya que Jesús vincula este comportamiento al quinto mandamiento. De forma similar, podríamos argumentar que aunque la pena de muerte ya no se aplica a las muestras públicas de comportamiento homosexual, la prohibición sigue existiendo de forma similar a la prohibición de maldecir a los padres.
En segundo lugar, recuerde que Buchanan dijo: "Jesús no dice nada sobre la homosexualidad". ¿Importaría si Jesús hubiera dicho algo sobre la homosexualidad?. El Antiguo Testamento dice varias cosas sobre el comportamiento homosexual y los escritores del Nuevo Testamento también, y los homosexuales que intentan justificar su comportamiento apelando a la Biblia las consideran intrascendentes y no aplicables al debate actual. Entonces ¿haría alguna diferencia lo que Jesús dijera? Ella presenta otro problema, Jesús en realidad cita y aplica Levítico 20:9 en el Nuevo Testamento: "Porque Moisés dijo: 'Honra a tu padre y a tu madre'; y 'El que hable mal de su padre o de su madre, morirá'". (Mk 7:10). Así que si va a usar a Jesús en un caso (Él no dice nada sobre la homosexualidad), entonces ¿por qué no en la aplicación del NT de Levítico 20:9?
No importa de qué manera se aborde el tema, no hay nada en la Biblia que pueda usarse para apoyar el comportamiento homosexual. Los homosexuales que afirman creer en la Biblia deberían consolarse con las palabras de Pablo: "No os engañéis: ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores heredarán el reino de Dios. Así erais algunos de vosotros; pero fuisteis lavados, pero fuisteis santificados, pero fuisteis justificados en el nombre del Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios" (1 Co 6, 9b-11).




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